Cuando pensamos en la humanidad ¿qué es lo primero que nos viene a la cabeza? En personas, en lugares, en ti; yo pienso en colores, sentimientos o los dos al mismo tiempo.
Cuando pienso en una persona alegre me viene un día de primavera lleno de colores brillantes, cuando pienso en alguien serio pero dulce me viene una tarde de otoño de color cálido pero últimamente he pensado un solo color que describe la situación de este mundo: blanco, un color claro como el de las nubes como la inocencia que tiene la humanidad cuando llega a este mundo pero al final al ir creciendo nuestra versión del mundo se vuelve densa y áspera cambiando la realidad a nuestro antojo y conveniencia, un color que fue la creación de los demás, un color que se adapta a las tinieblas, un color que creó la oscuridad.
En lo más profundo del corazón de este mundo todo es blanco, un color neutro que es moldeado a nuestro gusto pero aunque la gente dice que el blanco es un buen color y que para muchos es como el día y el negro la noche, si me preguntara sobre cual elegir yo diría sin pensar el negro, la noche tal vez sea tétrica pero es lo que pienso; para mí las sonrisas falsas, las máscaras que se pone la gente duelen más que las verdades.
La noche es oscura y ya sabes qué esperar de ella como lo que esperas de un demonio; que te traicione, que te ataque o te devore pero ya lo esperabas, o no? Después de todo es la noche pero si hablamos del día es como referirse a un ángel dulce y leal pero ¿qué pasa cuando ese ángel nos traiciona? Hay dolor, desilusión y un gran sufrimiento.
Ahora la gente piensa que las personsa más inofensivas a las que atacan son ángeles de color blanco que nunca les harán ningún daño por más que tus los dañes. Esa, es la mentira más grande del mundo, porque lentamente crean a un monstro peor que el demonio, una bestia que ataca lentamente y de manera silenciosa mientras se regodea de tu sufrimiento eso al final te terminara destrozando. No me considero un ángel, muchos me dicen sádica, fría y muy cruda con mis palabras pero prefiero ser recordada como un demonio a un ángel hipócrita.
Este mundo esta bañado de luz pero es una luz fría que cada vez que me veo bajo de ella temo mucho y me falta el aire. ¿Por qué será? Tal vez he perdido mi humanidad pero la verdad no lo creo porque sigo llorando, sigo sonriendo. Tal vez todos los humanos hemos perdido lo que es vivir correctamente en la humanidad. Aun así no me arrepiento y no temo morir mañana, solo temo no poder ver este mundo sin estar cubierta de esa blanca oscuridad pero ahora solo nos queda luchar contra nosotros mismos y el mundo, porque nadie ni nada te pertenece, ni siquiera tu propia vida o tus emociones. Sólo te queda luchar para obtener tu libertad y tener el derecho de pertenecerte a ti, eligiendo como es que quieres luchar: como un ángel o un demonio. Pero nadie lo hará por ti yo no puedo cambiar el mundo sola.
Nadie puede por más estudiado y preparado que esté, pero creo que eso es lo que hace el mundo más interesante. Así que yo te reto mundo a que me des con todo lo que puedas tener. Yo recibiré cada golpe, no importa que me deje marcas que me duren siempre. Serán la prueba de que he sobrevivido hasta el día de hoy y que puedo soportar hasta que al fin logre acostumbrarme a esta vida y que tú también lo hagas.
No quiero que crean que soy alguien muy maduro o experto o que intenten buscar quien soy porque no lo lograrán, solo soy alguien a quien le ha tocado vivir el infierno en el que el mundo sufre y la impotencia de no hacer nada, pero sobre todo está algo que la gente juzgue a alguien por su portada o por la cara que ellos han querido que veas si nos cuesta tanto entendernos y conocernos a nosotros mismos ¿como crees que podemos conocer a otra persona?
Colaboración de H.M México
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